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Montevideo dejará de tener agua “en condiciones de potabilidad” en 20 o 30 días, anunció la intendenta Carolina Cosse. A raíz de los datos de la Administración Nacional de Obras Sanitarias del Estado (OSE), la mandataria pidió que se declare la situación de alerta por la sequía.
“Se desprende de la información que hemos obtenido una situación en la cual en el entorno de 20 o 30 días, si nada cambia, dejaríamos de tener agua en condiciones de potabilidad, no así agua sanitaria”, anunció la intendenta Carolina Cosse en una conferencia de prensa, según informó Ámbito.
Cosse pidió al Centro Coordinador de Emergencias Departamentales (Cecoed) que declare la situación de alerta en la región por la escasez de agua. Además, el Cecoed y la Intendencia de Montevideo (IM) organizarán una mesa de trabajo para abordar la problemática.
Algunas de las medidas que tomará el equipo de trabajo será el relevamiento de pozos de agua disponibles y así poder llevar adelante tareas de muestreo, medición y tratamiento del agua.
Además, la OSE distribuirá agua potable en camiones cisternas en las regiones más vulnerables, anunció la intendenta. Esperan cubrir hospitales, centro de diálisis y escuelas.
Agua salada para aumentar el alcance de las reservas
Para hacer frente a la sequía, la OSE aumentó el nivel de salinidad en la mezcla de agua potable para extender el alcance de las reservas actuales. El Ministerio de Salud Pública uruguayo permitió el incremento de sodio a 400 mg por litro y de cloruro a 700 mg/L.
Los usuarios notaron el sabor salado del agua, pero las autoridades aseguraron que el cambio no significó un riesgo para la salud. Sin embargo, recomendaron a los ciudadanos con hipertensión grave o con insuficiencia renal que, en lo posible, consuman agua mineral embotellada.
Cambio climático: las sequías azotan Uruguay
“Tenemos una sequía que está durando más de lo que históricamente duró la más larga. El cambio climático nos afecta“, aseguró Cosse en la conferencia de prensa. Actualmente, Uruguay sufre la peor sequía del siglo y las autoridades declararon emergencia agropecuaria hasta septiembre.
Cosse cree que declarar la situación de alerta es “un llamado de atención a la población para que entre todos comprendamos la situación en la que estamos, y para que todos y cada uno tomemos nuestras acciones de responsabilidad en la vida cotidiana“.
