GMF Nature Based Solutions y Biocare Projects anunciaron el lanzamiento del primer hub de biochar para remociones de carbono a gran escala en Argentina, que se instalará en Gobernador Virasoro, provincia de Corrientes. El proyecto estará orientado a la transformación de residuos forestales de pino y eucalipto en biochar, un material que permite el almacenamiento estable de carbono por más de 200 años.
El objetivo del proyecto
Según informaron las compañías, la planta procesará alrededor de 140.000 toneladas de biomasa por año, provenientes de plantaciones y aserraderos certificados bajo estándares FSC, y producirá unas 23.000 toneladas anuales de biochar. Esa capacidad permitiría generar remociones estimadas en 45.000 toneladas de CO₂ equivalente (tCO₂e) por año, con posibilidades de expansión en una segunda etapa.
El proyecto se inscribe en el contexto del sector forestal argentino, que abarca 1.3 millones de hectáreas de plantaciones, concentradas mayormente en la región mesopotámica, donde se genera cerca del 78% de la producción forestal del país. De acuerdo con los datos difundidos, una parte significativa de los residuos forestales y de aserraderos se acumula o se quema a cielo abierto, lo que incrementa el riesgo de incendios y las emisiones de gases de efecto invernadero.
Desde el punto de vista tecnológico, la planta contará con dos reactores rotativos BITE-50 de Biocare para procesos de pirólisis lenta, con sistemas integrados de combustión, secado y una plataforma digital de medición, reporte y verificación (MRV) para asegurar la trazabilidad de las remociones de carbono.
Dónde se aplicará el biochar producido
Las empresas indicaron que el biochar producido será aplicado en suelos agrícolas y forestales locales, incluyendo cultivos como arroz, yerba mate y frutales, con el objetivo de mejorar la fertilidad del suelo, su estructura y la retención de agua, al tiempo que se reduce la quema de residuos.
La inversión estimada para el proyecto asciende a US$ 13,6 millones, e incluye la construcción y el primer año de operación. Según la información proporcionada, la iniciativa generará más de 60 empleos rurales directos en Corrientes y contribuirá al desarrollo de una bioeconomía circular en la provincia. El cronograma prevé el cierre financiero en el cuarto trimestre de 2025, la construcción durante 2026 y la primera emisión de créditos de remoción de carbono en 2027.










