Ecuador alcanzó un hecho histórico: concretó el canje de su deuda externa por la conservación de la biodiversidad de las Islas Galápagos. La conversión le permitirá invertir más de 450 millones de dólares para la protección de especies marinas como tortugas y tiburones ballena y martillo.
Las zonas a la que se destinarán los fondos son la Reserva Marina de Galápagos y Reserva Hermandad que suman casi 200 000 kilómetros cuadrados de superficie, según un comunicado oficial. Alrededor de 2500 especies marinas habitan esa región, muchas de ellas son especies migratorias en peligro crítico de extinción.
Los recursos también serán destinados a la creación del Galápagos Life Fund que financiará las actividades de conservación hasta 2040. Con esto buscan el monitoreo de océanos, la promoción de pesca sostenible y el fortalecimiento de la resiliencia climática.
“Este esfuerzo es parte de una estrategia global para avanzar hacia una economía productiva, inclusiva y sostenible, y constituye el canje de deuda por naturaleza más grande y significativo en la historia de la humanidad”, afirmaron en un comunicado oficial.
Ecuador convirtió una deuda de 1630 millones de dólares por una nueva deuda de 656 millones. Esto equivale a “comprar un dólar por 40 centavos”, explicó el ministro de Economía, Pablo Arosemena en la rueda de prensa. La recompra de la deuda permitirá que el país ahorre 1126 millones de dólares.
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) otorgó a Ecuador una garantía de 85 millones de dólares. DFC (International Development Finance Corporation) dio al país un seguro de riesgo político de 656 millones para la compra de la deuda existente.