La central hidroeléctrica Yacyretá es binacional, pertenece tanto a la Argentina como a Paraguay. A cada nación, le corresponde la mitad de lo que produce la central. Sin embargo, Paraguay consume solamente entre el 10 y el 15% de su parte de energía, por eso le vendía el resto a la Argentina. Pero, recientemente, cambió de decisión: no le cederá más a su par argentino, se quedará con un resto más para consumo interno y comercializará lo sobrante con Brasil. ¿Por qué?
Según Paraguay, Argentina adeuda 150 millones de dólares por la compra de la energía y por eso decidió dejar de venderle. No obstante, esta decisión coincide con la polémica por el cobro de peaje en la hidrovía.
Tanto Paraguay, como Brasil, Bolivia y Uruguay difundieron un documento en el que le solicitaron a la Argentina que deje de cobrar peaje en la hidrovía, en el tramo Santa Fe Norte de la Vía Navegable Troncal (VNT) Paraná-Paraguay. La Administración General de Puertos (AGP) cobra el peaje desde enero, para financiar el mantenimiento de la vía. Hasta el año pasado, el Estado argentino subsidiaba el dragado y el balizamiento del tramo.
En una entrevista con la CNN, el presidente de Paraguay, Santiago Peña, dijo que esta medida no tiene que ver con el tema del cobro del peaje, sino “con las deudas que están atrasadas”. Por su parte, el ministro de economía argentino y candidato a presidente por Unión por la Patria, Sergio Massa, respondió, en un acto realizado en Posadas, Misiones: “La Argentina construyó Yacyretá, Paraguay le debe muchos miles de millones de dólares por Yacyretá a la Argentina”.
Según afirmó la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (CAMMESA) a Perfil, la energía que Argentina le compraba a Paraguay se utilizaba sin desperdiciarse: “Para nuestro país es un problema si hay una parte de la generación que no se va a utilizar porque tendrá que reemplazarla“.