Se acerca el 14 de febrero, la celebración de San Valentín, también conocido como el Día de los Enamorados y en las parejas aparecen las preguntas de siempre: ¿qué le regalo que sea original? En esta nota te proponemos que más que llamativo, el presente sea sostenible para el planeta y se aleje de la lógica del consumismo. Te contamos algunas propuestas.
San Valentín dulce: pastelería agroecológica
“Borrajas, Cocina Salvaje” es un emprendimiento familiar de dos chefs mujeres que utilizan todos alimentos agroecológicos para la elaboración de sus comidas. Sin agrotóxicos, promueven la soberanía alimentaria y comer rico.
Algunos de sus postres recomendados para esta fecha amorosa son:
- Muffins de cacao amargo con corazón de frutos rojos
- Torta cítrica: bizcocho de mandarina, lemon curd y arándanos. Cubierta con crema de cajú, frutas y flores comestibles.
- Galletitas: cookies integrales de chocolate, frambuesas y arándanos.
En diálogo con Eco.News, Perla Herro, la impulsora de “Borrajas, Cocina Salvaje”, dijo: “Estos años hubo más interés en la alimentación consciente. Cocinamos con productos agroecológicos. Nuestra comida tiene cara: son organizaciones, personas y familias amigas. Conocemos quien la produce y caminamos juntos”.
Tienen servicio de Catering y hacen envíos particulares.
Ropa ecológica: útil y regenerativa
¿Qué mejor manera de tejer el amor con tejidos naturales sin pesticidas y elaborados con trabajo digno?
Stay True es un ejemplo de esto. Con precios similares a los del mercado convencional e incluso con descuentos, esta empresa es la primera en la Argentina que logró la certificación por producir algodón orgánico.
Familias Qom cultivan el algodón en Chaco. Luego, las prendas son confeccionadas manualmente y teñidas con tintes naturales.
Plantas nativas
Las flores son hermosas y son casi un regalo universal, para todo tipo de celebraciones. Sin embargo, si está el gusto, el espacio y el compromiso, sembrar plantas nativas como árboles o flores que pueden atraer mariposas también es algo mágico.
¿Qué más que celebrar el amor en sintonía con la naturaleza y la biodiversidad? No es necesario contar con un gran lugar. Incluso una campaña lanzada por el huertero urbano Carlos Briganti, referente del Colectivo Reciclador, lanzó una campaña llamada “Una ventana, un vivero”, para que las personas que viven en las urbanidades se animen a sembrar y tener una planta en el espacio que tengan disponible.
Hay muchos emprendimientos que venden semillas y plantines. Uno de ellos es la “Vivera Orgánica” que está llevado a cabo por mujeres que se encontraban vulnerabilizadas.
Si es sostenible para el planeta, es sostenible para el amor.