Se encontraron rastros de microplásticos en el semen de seis hombres del sur de Italia. La muestra se llevó a cabo en un total de 10 individuos y despertó las alarmas de la comunidad científica. La contaminación por plásticos aumenta a ritmos alarmantes y ya es posible hallarla en el cuerpo humano.
La semana pasada un grupo de científicos presentó una extensa investigación en el Congreso de la Sociedad Italiana de Reproducción Humana llevado a cabo en Sicilia, Italia, según informó Clarín. El estudio tuvo en cuenta residentes del sur del país europeo.
En el semen de los pacientes encontraron 16 fragmentos de microplásticos, entre ellos, polipropileno, polietileno, poliestireno, cloruro de polivinilo, policarbonato y material acrílico. Las partículas eran más pequeñas que un grano de polvo: medían entre 2 y 6 micrómetros.
¿Cuál es el origen de los microplásticos?
Si bien no hay una respuesta única sobre el origen de los microplásticos en el cuerpo humano, las autoras del estudio, Oriana Motta, Marina Piscopo y Elisabetta Giorgini, explicaron que puede incluir cosméticos, detergentes, dentífricos, cremas corporales, bebidas, alimentos e incluso partículas dispersas en el aire.
¿Cómo ingresan los microplásticos al cuerpo humano?
Las vías de ingreso de los microplásticos al cuerpo humano parecen ser varias. Entre ellas, las autoras de la investigación mencionaron la posibilidad de que ingresen mediante la alimentación, la respiración, e incluso la piel.
Con respecto al líquido seminal, “las vías de paso más probables para el semen humano parecen ser el epidídimo y las vesículas seminales, estructuras más fácilmente susceptibles a procesos inflamatorios que pueden favorecer una mayor permeabilidad”, explicó Luigi Montano, de la Sociedad Italiana de Reproducción Humana, según informó Clarín.
La reproducción humana en riesgo por la contaminación
Los descubrimientos alertaron a toda la comunidad científica. La aparición de microplásticos en el semen masculino amenaza la reproducción de la especie humana, manifestaron los autores del estudio.
Si bien aún se necesitan más investigaciones acerca de la problemática, los científicos creen que las micropartículas encontradas empeoran la calidad seminal.
Posiblemente estos microplásticos son un “caballo de Troya para otros contaminantes ambientales que, al unirse a ellos, provocan daños en los órganos reproductivos, que son muy sensibles a los contaminantes químicos“, alertó Montano.