El gobierno británico sigue tomando medidas que resultan polémicas para la Argentina, con respecto a las Islas Malvinas y el dominio auto adjudicado del país europeo en el mar. Tan solo unos días atrás, decidió, sin consultar a las autoridades argentinas, incrementar la zona donde prohíbe pescar en las Islas Georgias del Sur y Sándwich del Sur. Sin embargo, acaba de anunciar otra actividad: la construcción de un megapuerto en Malvinas. ¿Cómo afecta a la Argentina?
Principalmente, la preocupación se centra en el avance británico no solo en las Islas Malvinas, sino también en la Antártida argentina.
La construcción del megapuerto fue aprobada por el gobierno isleño. El nuevo puerto podrá ser usado para la pesca, el turismo, la extracción de petróleo, la defensa y la ciencia.
Sin embargo, la tensión se genera por otro miedo: según medios locales, la provincia argentina Tierra del Fuego teme que sea utilizado por Gran Bretaña para proyectar sus intereses en la Antártida.
Recientemente, el gobierno del país europeo aumentó su Área Marina Protegida (AMP) violando un protocolo clave de la ONU que prohíbe que tanto Argentina como Gran Bretaña tomen medidas en la zona sin permiso.
Tratado Antártico: la estrategia argentina para frenar el megapuerto en las Islas Malvinas
El gobierno argentino está analizando qué acciones llevar a cabo por la construcción del megapuerto y planea presentar una queja formal ante el Tratado Antártico por la ampliación de su AMP.
El Tratado Antártico fue firmado en diciembre de 1959 por 12 países y entró en vigencia en 1961. Su objetivo es evitar las controversias sobre los reclamos de soberanía en el continente de hielo. ¿Quiere el Reino Unido avanzar por sobre acuerdo y poseer parte del gigante de hielo que le pertenece a Argentina?