En un hito histórico para la lucha contra el cambio climático, La Haya se ha convertido en la primera ciudad del mundo en prohibir la publicidad de productos relacionados con combustibles fósiles y servicios altamente contaminantes como los vuelos y los cruceros.
Esta medida, que entrará en vigor el 1 de enero de 2025, posiciona a la ciudad neerlandesa como un referente mundial en la transición hacia una economía más sostenible.
Se trata de una medida muy similar a las restricciones publicitarias del tabaco impuestas en los años 60. De esta manera, buscan desalentar el uso de estos servicios de transporte altamente contaminantes.
La decisión del ayuntamiento de La Haya responde al pedido del secretario general de la ONU, António Guterres, quien instó a los gobiernos a eliminar anuncios que promuevan prácticas perjudiciales para el ambiente.
Leonie Gerritsen, concejal del Partido por los Animales y una de las principales defensoras de la medida, aseguró que la iniciativa es coherente con el objetivo de la ciudad de alcanzar la neutralidad climática para 2030.
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Según las ONG impulsoras del proyecto, la iniciativa ya generó expectativa en otras ciudades y se espera que próximamente otros gobiernos sigan el ejemplo y adopten medidas similares para combatir el cambio climático.