Un grupo de investigadores británicos detectaron que el principal virus de la gripe aviar llegó a la región de la Antártida. Lo hallaron en págalos subantárticos, una familia de aves marinas, sobre las costas. Los expertos consideran que llegó desde Sudamérica, en medio de la peor epidemia de este virus de la historia y que representa un riesgo para las especies locales de diversos animales, como los pingüinos.
La British Antartic Survey (BAS) fue la organización que comunicó la presencia del virus HPAI H5N1 entre los págalos subantárticos. Lamentablemente, muchos expertos pensaban que esto iba a ocurrir, ya que se trata de la peor pandemia de la historia de la gripe aviar. Es la primera vez que descubren este virus en la región antártica.
Tras encontrar págalos subantárticos muertos en las islas Georgia del Sur, en alta mar, los investigadores británicos tomaron muestras de estos animales marinos y descubrieron que estaban infectados. Asimismo, creen que el virus fue contagiado por aves desde América del Sur, ya que la región estuvo muy afectada los últimos años y tuvo que sacrificar millones de aves de corral.
“Las vías naturales son el principal medio de propagación de la gripe aviar altamente patógena y es probable que la propagación de la enfermedad haya sido causada por el regreso de las aves de su migración a América del Sur, donde hay un gran número de casos de este virus”, informaron desde BAS. Los expertos temen que el virus llegue a contagiar a pingüinos del continente, ya que, al no haber estado nunca en contacto con el HPAI H5N1, no desarrollaron inmunidad frente a esto.
“Son noticias dramáticas”, expresó en su cuenta de X (ex Twitter), la especialista en gripe aviar Michelle Wille. Por su parte, desde BAS, agregaron: “BAS y el Gobierno de Georgia del Sur y las Islas Sandwich del Sur permanecen atentos a nuevos casos y los programas científicos y de visitantes continúan actualmente bajo medidas de bioseguridad mejoradas”.