El Chaltén está en alerta. Ubicada dentro del Parque Nacional Los Glaciares, el más extenso de la Argentina y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, la capital del trekking se encuentra en peligro. La comunidad zonal se está movilizando en defensa de la conservación ambiental de esta parte de la Patagonia que está siendo impactada negativamente por la sobrecarga turística.
La infraestructura actual no alcanza para albergar la cantidad de visitas y ofrecer un sistema sanitario eficiente. El Parque Nacional Los Glaciares se destaca por su belleza, su importancia glaciológica y geomorfológica; su enorme biodiversidad y su fauna en peligro de extinción. Se trata de uno de los principales atractivos turísticos del país y del turismo internacional. Además, es una reserva de agua dulce.
Sin embargo, se encuentra en alerta sanitaria por la gestión deficiente de servicios: el turismo crece a un ritmo más rápido que la actualización de su infraestructura. Este rincón de la Patagonia austral argentina con vistas espectaculares del cerro Fitz Roy se convirtió en un centro de escalada mundial, pero ante la llegada del turismo (que va en aumento) se encontró con limitaciones en los servicios básicos, atención médica limitada y problemas de saneamiento, incluyendo la sobrecarga de una planta de tratamiento de desechos cloacales.
El Chaltén: de reservorio a agua contaminada
Uno de los problemas más urgentes que tiene El Chaltén es el estado crítico de su planta de tratamiento de desechos cloacales. “La capacidad de la planta se encuentra al límite, y antes del inicio de la temporada turística de verano se han registrado vertidos con escaso tratamiento de desechos en los ríos de la región. Esta situación plantea serias amenazas para la salud pública y la integridad de los cuerpos de agua naturales en el área”, denunciaron ONG locales, como BOANA.PRO, Amigos del Parque Nacional Los Glaciares y Fundación Anfibia “Gestión Popular del Hábitat”.
El Chaltén tiene alrededor de 3 000 habitantes y recibe a más de 10 000 turistas por día en temporada alta. “La alerta sanitaria expone que la presencia de bacterias multirresistentes (BMR) en el agua de la confluencia de los ríos pone en riesgo la salud de las personas y la biodiversidad del ecosistema”, explicaron los activistas.
“Hoy El Chaltén está en una encrucijada entre la promoción del turismo sustentable y la necesidad urgente de abordar las demandas de servicios y la conservación ambiental en una región que busca equilibrar el desarrollo económico con la preservación de su patrimonio natural”, dijeron y recordaron que la Patagonia tiene el 42.2% de la afluencia de visitantes a nivel nacional, y que, aunque El Chaltén es conocido por promover un turismo respetuoso con el ambiente, el enorme crecimiento del turismo ha sobrecargado la infraestructura y los servicios públicos, generando tensiones locales.
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Los activistas fueron concluyentes: “Uno de los mayores desafíos en la región es reconciliar el turismo con la preservación de la naturaleza para lograr un turismo sustentable con la menor huella posible”.
El Chaltén: cronología de una lucha activista por la sostenibilidad
- 2020/2021: publicaron un informe sobre la contaminación del Río de las Vueltas, y en el río Fitz Roy.
- 2021: un mapeo colaborativo sobre la gestión de desechos fisiológicos en áreas remotas del Parque Nacional Los Glaciares sugirió la necesidad de realizar una línea base para identificar las fuentes de contaminación y sus alcances.
- Invierno/primavera 2021: coordinación del proyecto “Donde Nacen Las Aguas” entre actores estatales y asociativos, con la realización de muestreos para la línea base.
- Principios del 2022: vecinos de El Chaltén presentaron solicitudes de información pública sobre el tratamiento de efluentes y sobre la calidad de aguas de la red de agua potable, después de un desborde de la cloaca.
- Marzo 2022: redacción del informe de contaminación por la Administración de Parques Nacionales (APN).
- Finales de 2022/principio de 2023: formación del proyecto activista “Guardianes de la Cuenca” y movilización comunitaria para la firma de notas de solicitud de información pública.
- Invierno 2023: respuesta de la APN, en la que se confirmó el vertido de efluentes en los cursos de agua y la detección de la descarga de aguas residuales sin tratar en los ríos dentro del Parque Nacional Los Glaciares, una problemática preocupante que persiste desde 2016. También se informó que tras un monitoreo de los niveles de bacterias coliformes y Escherichia coli en los ríos Fitz Roy y De las Vueltas, los resultados indicaron niveles más altos de estas bacterias aguas abajo de la planta de tratamiento de Servicios Públicos Sociedad del Estado (SPSE).
- Octubre 2023: reunión entre investigadoras del IIMyC-CONICET y personal del puesto sanitario para discutir la presencia de bacterias resistentes a antibióticos en el Río de las Vueltas.