El cambio climático y la contaminación influye en los nacimientos prematuros, dice un nuevo informe de la ONU. Alrededor de 13,4 millones de bebés nacieron prematuros durante el 2020 y alrededor del 20% de las muertes de bebés recién nacidos fue causada por la contaminación atmosférica.
Un nuevo estudio de la ONU a cargo de la OMS y UNICEF, Nacidos demasiado pronto: decenio de acción sobre el parto prematuro, investigó las cifras a nivel global y regional de los partos prematuros y las probabilidades de supervivencia según el lugar de nacimiento y los ingresos familiares.
Los autores afirman que los nacimientos prematuros son la principal causa de mortalidad infantil y, si sobreviven, pueden sufrir consecuencias en su salud a lo largo de toda la vida. La mayor tasa de partos prematuros se registraron en el sur de Asia y en África, alrededor del 65% de los casos ocurren en esas regiones.

El papel del cambio climático y la contaminación atmosférica
El estudio de la OMS y UNICEF relacionaron el cambio climático y la contaminación atmosférica con esta problemática. Las cifras del informe son alarmantes: “Se estima que en 2019 la contaminación atmosférica contribuyó al nacimiento de 6 millones de bebés prematuros y casi 3 millones de bebés con bajo peso”.
Además, los autores calcularon que en 2020 la contaminación atmosférica causó el 20% de las muertes de bebés recién nacidos como resultado de nacimientos prematuros y bajo peso al nacer.
El aumento de las temperaturas en todo el mundo y las olas de calor cada vez se cobrar más vidas. “El calor extremo, que cada vez es más frecuente y más extendido, también se relaciona con partos prematuros y muerte fetal”, asegura el informe.