¿Sabías que el agua que bebes puede tener un impacto significativo en tu salud?
El agua estructurada, también conocida como agua hexagonal o agua informada, es un tipo de agua que ha sido sometida a un proceso que modifica su estructura molecular, otorgándole propiedades especiales que la diferencian del agua común.
Según cuenta la revista digital Cuerpo Mente, “el naturalista e ingeniero Viktor Schauberger asoció el agua saludable a su movimiento. Para él, el agua viva fluye y se arremolina y posee propiedades que se han perdido en el agua quieta o manipulada”. Por su parte, el químico surcoreano Mu Shik Jhon relacionó las cualidades del agua con su capacidad para organizarse en estructuras hexagonales a nivel molecular. “Cuanto más estructurada, más saludable resulta, pues puede cumplir mejor con su papel biológico”, destaca el artículo de la revista especializada en temas de salud.
¿Cuáles son los beneficios del agua estructurada?
En su libro El puzzle del agua y la clave hexagonal, Mu Shik Jhon subraya los siguientes puntos a favor del agua hexagonal o estructurada:
- Mejora la hidratación celular: El agua estructurada penetra las células con mayor facilidad, lo que mejora la hidratación y el funcionamiento de todo el cuerpo.
- Aumenta la energía: Ayuda a transportar oxígeno y nutrientes a las células, lo que incrementa los niveles de energía y la vitalidad.
- Fortalece el sistema inmunológico: Colabora en la eliminación de toxinas y desechos del cuerpo, lo que fortalece el sistema inmunológico y reduce el riesgo de enfermedades.
- Mejora la digestión: El agua estructurada influye en la regulación del pH del estómago y facilita la digestión de los alimentos.
- Reduce la inflamación: Tiene propiedades antiinflamatorias que pueden ayudar a reducir el dolor y la inflamación en el cuerpo.
- Mejora el rendimiento físico: Ayuda a los músculos a recuperarse más rápido del ejercicio, lo que mejora el rendimiento físico.
¿Cómo se obtiene el agua estructurada?
Existen diferentes métodos para obtener el recurso natural. La exposición a campos magnéticos, es uno de ellos. En este caso, se utilizan dispositivos que generan campos magnéticos para modificar la estructura del agua.
Otra forma de obtención es la filtración para la cual se aplican filtros especiales que eliminan las impurezas del agua y le dan una estructura más ordenada.
Finalmente, puede acudirse a lo que se conoce como vortexing, es decir, se crea un vórtice en el agua que la energiza y le da una estructura más hexagonal.
Evidencia científica
Existen diversos estudios científicos que avalan los beneficios del agua estructurada. Un estudio publicado en la revista “The Journal of Alternative and Complementary Medicine” encontró que mejoró la hidratación celular, la energía y el rendimiento físico en un grupo de atletas.
Otro estudio publicado en la revista “Nature” descubrió que redujo la inflamación en un grupo de personas con artritis reumatoide.
Más allá de las investigaciones, el autor japonés Masuru Emoto es contundente en su libro “Los Mensajes del Agua“: “El pensamiento humano, las palabras, la música, las etiquetas en los envases, influyen sobre el agua y ésta cambia a mejor absolutamente. Si el agua lo hace, nosotros que somos 70-80% agua deberíamos comportarnos igual”.
Si buscas mejorar tu hidratación, energía, digestión, sistema inmunológico y rendimiento físico, el agua estructurada puede ser una excelente opción para ti. Pero, además, puede ser una hermosa oportunidad para indagar sobre la magia de la naturaleza.