El arroz es un cereal rico en proteínas y carbohidratos, aportando así gran cantidad de energía. Favorece la absorción de nutrientes en el intestino y previene el estreñimiento e hinchazón estomacal. Al ser un alimento bajo en grasa, es ideal para llevar una dieta equilibrada e incluso puede prevenir enfermedades como el cáncer y el Alzheimer.
Como la pasta, el arroz se agranda al cocinarlo. Muchas veces podemos excedernos de cantidad si no lo medimos adecuadamente. Esto puede conducir a tener grandes cantidades de arroz en la heladera, a tal punto que ya no sabemos cómo utilizarlo de manera variada para darle otro uso y sabor. La buena noticia es que el arroz es tan versátil que puede aplicarse a distintos platos nutritivos. A continuación, te contamos algunos secretos de la cocina, simples y rápidos para resolver tus almuerzos y cenas.
- Sopas y caldos

Podemos sustituir los típicos fideos de pasta por arroz y así hacemos más contundente y saciante el plato. Sumamos la cantidad deseada unos minutos antes de que pare de hervir la sopa, y así le añadimos texturas a un típico plato de invierno, volviéndolo más nutritivo y saciante.
- Fajitas o burritos

Si no queremos el arroz como guarnición o acompañante podemos sumarlo a una fajita o suculento burrito. En una tortilla con su guacamole, pico de gallo, pollo, carne o en su versión vegetariana llena de vegetales , podemos incluir arroz, que combina a la perfección con todo lo que tengas en la heladera. Mismo podés sumar porotos para darle un toque especial y equilibrado a tu plato.
- Croquetas de arroz

Las croquetas al fin y al cabo son masas fritas que se pueden hacer perfectamente con sobras e ingredientes que tenemos en nuestra heladera.
Ingredientes para las croquetas de arroz:
-200 gr de arroz blanco cocido
-100 gr Jamón troceado
-100 gr de queso mozzarella rallado
-1 huevo batido
-1 huevo batido (para el rebozado)
-Pan rallado (para el rebozado)
-1 huevo duro troceado
-Aceite
-Sal y pimienta
Elaboración de las croquetas de arroz
En un bol ponemos el arroz, el jamón, el huevo batido, el queso y condimentamos con un poco de sal y pimienta. Removemos hasta conseguir una masa homogénea. En un plato o bandeja añadimos el pan rallado y en otro aparte, el huevo batido. Hacemos bolas de masa con la ayuda de dos cucharas y las pasamos por el pan rallado, para que queden bien impregnadas. En una sartén con aceite a fuego alto volcamos las croquetas y las freímos hasta que estén doradas. Las secamos en un plato con papel absorbente, ¡y listo!
¿Qué otra idea sumarías para darle una segunda vida al clásico arroz?