La empresa Sway es uno de las tantos emprendimientos sustentables que se basan en la economía circular para darle una nueva vida a los productos que normalmente desechamos. El innovador método de la compañía estadounidense aprovecha el poder de las algas para crear sustitutos del plástico que se pueden convertir en abono doméstico.
En vez de crear más plástico a través de procesos químicos contaminantes, Sway utiliza los polímeros naturales ya presentes en las algas marinas para crear bioplásticos que imitan las atractivas cualidades del plástico. Lo mejor: no genera los efectos contaminantes del plástico en el planeta.
Cómo es el proceso para crear plástico a través de algas marinas
Sway trabaja con granjas oceánicas que cultivan algas marinas de manera responsable. Las granjas oceánicas regeneran los sistemas naturales al reducir la acidificación de los océanos y proporcionar un hábitat para un número diverso de especies marinas. Además, son espacios esenciales que proporcionan los beneficios de las algas que son cultivadas para fines específicos.
En la época de cosecha, los trabajadores realizan una especie de “corte de pelo” a las algas cultivadas con métodos amigables que permiten que luego se regeneren de manera natural. Así, se generan puestos de trabajo y se aprovechan los polímeros naturales que ya están presentes en las algas. Luego, el proceso consiste en:
- Los granjeros cortan el pelo de las algas marinas.
- Las algas se secan en las playas.
- Se separan los componentes útiles de las algas marinas.
- Se refina el componente útil en laboratorios.
- Se separa la biomasa para obtener el polímero natural de las algas marinas.
- Se combina con otros materiales para crear pellets.
- Se usa el pellet para crear bolsas biodegradables.
A través de este innovador método, la empresa crea “bolsas de plástico que tienen una vida útil de 12 meses. Una vez pasado este tiempo, el material desaparece entre las cuatro y seis semanas posteriores.”
Además de las bolsas de plástico, la empresa ha logrado crear recientemente una tecnología llamada TPSea™: una nueva categoría de biopolímero que es compostable y proviene 100% de fuentes renovables. Esta, a diferencia de los tradicionales pellets a base de petróleo, es una “resina” completamente biológica.
¿Qué te parece este método para crear plástico biodegradable?