Argentina, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay solicitarán a la Unión Europea que se postergue la implementación del reglamento que obliga a exportar productos “libres de deforestación” a partir de 2025.
La decisión fue tomada en el marco de la 136° Exposición de Ganadería, Agricultura e Industria organizada por la Sociedad Rural Argentina que reunió a los líderes agropecuarios del sur global. De ser aceptada la postergación, estos 5 países latinoamericanos podrían seguir produciendo y exportando productos que provienen de tierras deforestadas.
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De no ser aceptada la solicitud que emitirán los integrantes del Consejo Agropecuario del Sur (CAS), ninguno de estos países podría comercializar en la Unión Europea productos como carnes, sojas, chocolate y muebles, que provengan de bosques destruidos para ese fin, a partir de 2025.
Expo Rural: por qué quieren evitar el reglamento que exige “productos libres de deforestación”
El reglamento considerado como un avance ambiental en Europa, fue recibido como una medida con alto “impacto negativo para el comercio internacional”, según los representantes agropecuarios del Cono Sur.
El encuentro que reunió a secretarios y ministros de Agricultura de Argentina, Chile, Uruguay, Paraguay, Brasil y Bolivia, el secretario y presidente del CAS, Sergio Iraeta, expresó que la normativa de la Unión Europea constituye una “barrera para el acceso al mercado europeo”.
Días después de la emisión de la carta que solicita a la Unión Europea la postergación del reglamento, el presidente argentino, Javier Milei, hizo referencia al mismo en un discurso en la Expo Rural. Allí, evidenció la postura que mantiene el agro respecto al Reglamento (UE) 2023/1115 que fue aprobado en 2023 y entrará en vigor a partir de 2025.
Qué dice el reglamento sobre productos libres de exportación
Los conceptos sobre deforestación son numerosos. Sin embargo, a nivel global, se entiende por ‘deforestación’ a todo proceso de “tala de un bosque, eliminándolo por completo, para dar espacio a algo más en su lugar“, según el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF).
Ante la crisis climática que atraviesa el mundo, el Parlamento Europeo aprobó en 2023 una ley que restringe la importación de productos provenientes de áreas recientemente deforestadas. En su primera fase, esta regulación afecta a todos aquellos productos que hayan utilizado ganado bovino, cacao, café, palma aceitera, caucho, soja y madera, provenientes de tierras desforestadas.
La ley, que entrará en vigor en 2025, ataca a productos mundialmente comercializados como:
- Carne de bovino, fresca, refrigerada o congelada.
- Cueros o pieles en bruto o curtidos de bovino.
- Cacao en grano, en pasta, en polvo y todo chocolate que contenga cacao.
- Café.
- Aceite de palma y otros ácidos y aceites que tengan como materia prima la palma aceitera.
- Caucho (hilos, cuerdas, neumáticos, prendas de vestir)
- Habas, harinas, aceite de soja.
- Madera: leña, cajas, muebles, papel, etc.
Todos estos productos que provengan de tierras deforestadas o hayan causado deforestación después del 31 de diciembre de 2020, no podrán ingresar a la Unión Europea para ser comercializados, ya sea que hayan sido producidos en desmontes legales o ilegales.
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Además de respetar la legislación nacional ambiental, las materias primas y los productos limitados deberán proteger los derechos humanos considerados por el Derecho internacional, principalmente los de los pueblos indígenas y las comunidades locales que suelen verse afectadas por la invasión de las grandes empresas.
Las corporaciones deberán considerar la “cooperación de buena fe con esos pueblos indígenas y la existencia de reclamaciones debidamente motivadas de los pueblos indígenas sobre el uso o la propiedad de la parcela de donde se extrae la materia prima”.
El impacto de la deforestación en el mundo
Todos los productos que provienen de tierras deforestadas, desde un chocolate hasta una puerta de madera, esconden un conjunto de múltiples impactos negativos en el ambiente. Es que los bosques, que cubren el 31 % de la superficie terrestre, albergan la mayor parte de la biodiversidad del mundo y son esenciales para mitigar el cambio climático.
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, el planeta ha perdido unos 420 millones de hectáreas de bosque a causa de la deforestación en los últimos 30 años.
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El problema es aún más grave las regiones tropicales y subtropicales. Los últimos datos indican que la expansión agrícola es la responsable de casi el 90 % de la deforestación en todo el mundo.
En este contexto, el marco jurídico propuesto por la Unión Europea es un método de regulación esencial para reducir el impacto del consumo masivo y evitar que las empresas dañen los últimos bosques y ecosistemas prístinos que quedan en la Tierra.
¿Qué pensás sobre el marco regulatorio establecido por la Unión Europea para proteger a los bosques?