El sagaz documental Christspiracy, creado por Kip Andersen y Kameron Waters, pone la relación de Jesús con los animales en el ojo de la tormenta. En medio de un debate espiritual, ético y religioso, Christspiracy promete revelar una verdad sobre la alimentación de Jesús que cambiará la historia de la humanidad para siempre.
¿Existe una forma espiritual de matar a un animal? O, mejor dicho, ¿cómo mataría Jesús a un animal para comerlo? Eso es lo que se plantearon los directores de Christspiracy. Según el tráiler oficial del documental, la respuesta pareciera revelarse gracias a la ardua investigación del equipo realizador.
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Sin embargo, hay ciertos indicios en la Biblia (el máximo documento histórico sobre la vida de Jesús) que podrían evidenciar cuál es la relación que tenía Jesús con los animales.
A pesar de no desarrollar el tema de manera explícita (¿a propósito o sin querer?), las Sagradas Escrituras son un documento que, bien interpretado, puede revelar información inédita sobre cómo era la vida hace más de 2000 años. Estos indicios podrían ayudar a comprender la relación que llevaba Jesús con los animales.
Jesús se comparaba a sí mismo con diversos animales
Jesús se identificaba con los animales, y ese es uno de los primeros indicios que podrían evidenciar una alimentación vegana por parte del maestro espiritual más influyente de los últimos siglos.
La historia cuenta que Jesús nació en un hogar de ovejas y bueyes. Además, distintos versículos de la Biblia hablan de Jesús como el “Cordero de Dios” (Juan 1:29) o “la gallina que reúne a los polluelos bajo sus alas” (Mateo 23:37).
Además, en el “Apocalipsis”, Dios se presenta como “el León de Judá” (Apocalipsis 5:5).
Teniendo en cuenta que la compasión era uno de los pilares fundamentales de su vida, es difícil imaginar al ser empático y misericordioso que era Jesús, matando y comiendo los animales de los que él mismo se sentía parte.
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La compasión de Jesús con los animales
La compasión, es entendida como el sentimiento de empatía con los demás seres vivientes. Bajo esta premisa, los hábitos y la cotidianidad se Jesús se regían a través de la empatía y la compasión.
Jesús evidencia su compasión por los animales en distintos versículos de las Sagradas Escrituras:
- La naturaleza como maestra: Jesús pone de ejemplo a la naturaleza reiteradas veces, como camino hacia la elevación espiritual. En el Sermón de la montaña, por ejemplo, habla de los lirios y los pájaros como modelos de discípulos cristianos. Jesús señala a los gorriones, criaturas simples y de bajo valor económico para la industria ganadera actual, y le dice a la multitud que “ni uno de ellos cae a tierra sin vuestro Padre” (Mateo 10:29:31).
- Cuidaba de los animales: en su demostración de “ponerse en el lugar del otro”, los animales eran una prioridad para Jesús. Según cuenta la Biblia, cuando llegó a Jerusalén, Jesús llevó al burro que montaba junto a su madre, para no separarlo de ella. A pesar de que la ley lo prohibía, Jesús evitó separar a la madre de su potro para no causar un dolor emocional innecesario en los animales.
- El yugo de Cristo: los yugos son arneses de madera que se sujetan en los cuellos de los animales y después se unen a un arado o un carro. En la época de Jesús, el “yugo cruel” era aquel que estaba mal hecho, era pesado y generaba un gran dolor en el animal. Por el contrario, un “yugo llevadero” era aquel que estaba hecho delicadeza, se ajustaba bien y era liviano. En Mateo 11:28-30, Jesús dice “Mi yugo es llevadero” y enfatiza en su buen trato y empatía con los animales.
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A pesar de que la Iglesia nunca entró en detalles sobre la alimentación específica de Jesús, una interpretación profunda de la Biblia puede dar señales de algo que nunca se ha contado en la historia de la religión.
Según las Sagradas Escrituras, Jesucristo “libera a toda la creación de su esclavitud” (Romanos 8) y “hace la paz entre todas las cosas en el cielo y en la tierra” (Colosenses 1:20; Efesios 1:10).
Finalmente, una de las citas más populares de Jesús registrada en (Hebreos 10:8-14) lo dice todo: “Porque misericordia quiero, y no sacrificio”.
¿Creés que Jesús comía animales?
Fuente: Gen V
