La tracción a sangre ya no estará permitida en el municipio de Lanús, provincia de Buenos Aires. La normativa promueve la protección de animales como caballos, mulas y demás especies equinas. Además, prevé alternativas para las familias que dependen económicamente de esta práctica.
Según informó el municipio de Lanús, el Concejo Deliberante aprobó la ordenanza. La normativa fue impulsada por Diego Kravetz, Jefe de Gabinete del municipio, y la comunidad de vecinos proteccionistas.
“Queda prohibida la tracción a sangre y se declara a la especie equina como sujeto de derechos”, anunció Kravetz en sus redes. “Somos el primer municipio de Argentina en declararlos seres sintientes, le decimos chau a esta práctica arcaica y cruel. Ahora los animales van a ser respetados y tratados con dignidad”.
Todo tipo de vehículo constituido bajo tracción y/o tiro a sangre animal no humana estará prohibido. La norma alcanza a particulares y a personas jurídicas, como depósitos, chatarrerías y otros establecimientos comerciales que transporten bienes o personas sobre equinos.
Aquellos que no cumplan la nueva normativa, recibirán multas del doble de lo establecido por cruzar un semáforo en rojo —alrededor de $60 000—. La reincidencia será penalizada con la clausura del establecimiento.
Sustitución de animales por vehículos
El municipio de Lanús dará vehículos a todos los vecinos que entreguen voluntariamente a los animales que usaban para tracción a sangre. De esta manera, no se verá afectada su fuente de ingreso económico.
Para implementar esta medida, las autoridades realizarán un censo. Registrarán a todas las personas que sean tenedoras, tutoras, cuidadoras, responsables o depositarias judiciales de animales de la especie equina.
Excepciones a la medida
Si bien se prohibió la tracción a sangre con fines personales o comerciales, hay excepciones a la medida del municipio. Quedarán exceptuados de la normativa todos aquellos vehículos a tracción de carácter histórico y folclórico. Además, estará permitida la equinoterapia.
Para monitorear el cumplimiento de la normativa, se creó un Observatorio de Protección Animal No Humano (ANH) y un sector destinado a la policía ambiental dentro del área de Seguridad y Movilidad Sustentable.