Con el objetivo de analizar el presente y futuro de una industria clave para la economía argentina, Forbes Argentina llevó a cabo la segunda edición del Forbes Mining Summit, un espacio en el que los principales actores del sector debatieron sobre los avances, desafíos y oportunidades de la minería local en un contexto global de creciente demanda de minerales estratégicos.
En un mundo que avanza hacia la transición energética, la Argentina tiene una ventana de oportunidad única para posicionarse como un proveedor confiable de litio, cobre, oro, plata y otros minerales esenciales. Sin embargo, para lograrlo, el país debe resolver desafíos clave en infraestructura, regulación y sostenibilidad.
El próximo motor económico: minería como generadora de divisas
Uno de los temas centrales del encuentro fue el rol de la minería como el tercer mayor generador de divisas en los próximos años. Con exportaciones que ya superan los US$ 3.800 millones anuales, el sector tiene potencial para escalar aún más, siempre y cuando se logre una agenda coordinada entre el sector público y privado.
Las provincias mineras, como Catamarca, Salta, Jujuy y San Juan, ven en esta actividad una oportunidad para dinamizar sus economías regionales, generar empleo y agregar valor local. Sin embargo, persisten debates sobre cómo avanzar hacia una mayor industrialización de los recursos, en un mercado global que aún privilegia la exportación de materias primas.
“Hay inversiones de envergadura que van a llegar sobre el final de este año con la aprobación del RIGI”, reflexionó Roberto Cacciola, presidente de la Cámara Argentina de Empresas Mineras (CAEM). En consonancia, el director nacional de cadena de valor e infraestructura Minera, Fernando Ciacera, expresó: “Las inversiones mineras podrán llegar a los 19.000 millones de dólares para comienzos de la próxima década”.
Litio: la estrella que sigue brillando
A pesar de la caída en el precio internacional del litio, Argentina sigue siendo uno de los países más atractivos para la inversión en este mineral clave para las baterías de vehículos eléctricos. Con múltiples proyectos en desarrollo y una cartera de inversiones que supera los US$ 5.000 millones, el país forma parte del llamado “Triángulo del Litio” junto a Chile y Bolivia.
Los expertos coincidieron en que, para aprovechar al máximo este recurso, es necesario mejorar la infraestructura energética y logística, así como avanzar en acuerdos que permitan una mayor integración con la industria tecnológica global.
“Ahora desde afuera miran a Argentina geopolíticamente como un lugar que puede ser responsable de suministrar los minerales que el mundo necesita para el futuro”, analizó Ignacio Costa, Gerente General de Río Tinto Lithium en Argentina.
Cobre: el momento del despegue
Tras años de postergaciones, el cobre argentino parece estar listo para su gran salto. Con el Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI) y un escenario macroeconómico más estable, proyectos como MARA (Agua Rica-Alumbrera) y Los Azules podrían comenzar su fase de construcción en el corto plazo.
El cobre es un mineral clave para la electrificación global, y Argentina tiene reservas que la podrían convertir en un jugador relevante en el mercado internacional. No obstante, se requiere claridad normativa y una política de Estado a largo plazo para atraer las inversiones necesarias.
Mientras tanto, ¿qué pasa con el oro y la plata? Si bien históricamente han sido los principales productos de exportación minera del país, la falta de exploración y el agotamiento de algunos yacimientos han encendido alarmas.
Para reactivar este segmento, se necesitan nuevos descubrimientos y políticas que incentiven la exploración. Proyectos como Cerro Moro (Santa Cruz) y Veladero (San Juan) siguen siendo importantes, pero sin inversión en exploración, el futuro de estos metales en Argentina es incierto.
No obstante, la minería argentina no se limita solo a los metales más conocidos. El país tiene un enorme potencial en uranio, potasio, tierras raras y minerales para la construcción, todos esenciales para industrias tecnológicas y energéticas.
El desafío es desarrollar una estrategia integral que permita diversificar la producción y atraer inversiones en estos sectores menos explorados.
“Argentina está teniendo su momento internacional. Como si acabara de llegar a la fiesta y todos están prestando atención”, alentó Stewart Wheeler, Embajador de Canadá ante la República Argentina y la República de Paraguay.
El camino hacia una minería sostenible
Uno de los temas más discutidos fue la sostenibilidad. La minería del futuro debe cumplir con altos estándares ambientales y sociales, lo que incluye el uso de energías renovables y una huella de carbono reducida.
Sin embargo, la falta de infraestructura eléctrica en muchas zonas mineras es un obstáculo. Para resolverlo, se requiere una mayor articulación entre el sector público, las generadoras de energía y las empresas mineras.
Otro desafío es fortalecer a las pymes del sector para que puedan acompañar el crecimiento acelerado que se proyecta. La cadena de proveedores mineros es un actor silencioso pero fundamental, ya que genera un importante derrame económico en las comunidades locales.
Durante el Summit, los mandatarios de las principales provincias mineras destacaron la necesidad de una agenda conjunta entre Nación y provincias para simplificar trámites, mejorar la infraestructura y garantizar seguridad jurídica.
En un mundo que demanda cada vez más minerales para la transición energética, Argentina tiene una oportunidad única por sus recursos, estabilidad geopolítica y capacidad de producción con baja huella de carbono.