Dubái y Abu Dhabi, las dos ciudades más conocidas de los Emiratos Árabes Unidos, han sido víctimas del cambio climático. Las recientes inundaciones que afectaron a dos de las urbes más populares a nivel mundial han dejado víctimas fatales y diversos destrozos.
En una actualidad moderna afectada por el aumento de las temperaturas, es necesario pensar la relación entre el cambio climático y los eventos extremos cada vez más frecuentes en las grandes ciudades.
Dubái: cómo se relacionan las inundaciones con el cambio climático
A pesar de la relación entre la siembra de nubes y las inundaciones, el cambio climático es un efecto clave en el desastre climático que azotó a Dubái, Omán y otras zonas cercanas.
Lejos de ser un fenómeno aislado, el cambio climático tiene un impacto significativo en la frecuencia e intensidad de las inundaciones que afectan a las ciudades.
En este sentido, las causas principales de las inundaciones como las que ocurrieron en Dubái, Abu Dhabi y Omán son:
- Aumento del nivel del mar: el derretimiento de los glaciares aumenta el nivel del mar y hace que las zonas costeras sean más propensas a las inundaciones cuando hay tormentas.
- Lluvias torrenciales: el cambio climático genera episodios de precipitaciones menos frecuentes pero más violentos. Esto genera sobrecarga en la infraestructura urbana, daños e inundaciones generalizadas.
- Exceso de urbanización: el esparcimiento de las estructuras urbanas por doquier disminuye cada vez más las áreas de suelo puro. Estas últimas son esenciales para la absorción de agua de lluvia. Ante su escasez, el riesgo de inundaciones aumenta de forma considerable.
- Aumento de la población: a mayor cantidad de habitantes en las ciudades, mayor presión se genera sobre los recursos hídricos y sobre los sistemas de drenaje.
Antes estas situaciones, las estrategias de adaptación al cambio climático son esenciales para disminuir los efectos de estos eventos extremos que cada vez llegan a más ciudades del planeta.