La creciente inflación y la pérdida del poder adquisitivo están obligando a los argentinos a ajustar drásticamente sus hábitos de consumo. Una reciente encuesta de Moiguer Consultora revela un panorama preocupante: ocho de cada diez argentinos han reducido o eliminado gastos en diversos rubros durante los últimos meses.
Un estudio realizado a 1300 personas de entre 16 y 75 años arroja datos contundentes sobre el impacto de la crisis económica en el bolsillo de los argentinos. Los resultados de este sondeo, enmarcado en el informe “Mood Social”, muestran una clara tendencia a la baja en el consumo de una amplia variedad de bienes y servicios.
Entre los gastos más afectados de los argentinos se encuentran:
- Transporte: El 90% de los encuestados ha dejado de utilizar servicios de transporte por aplicación como Uber o taxi. El 68% redujo el uso de su auto o moto.
- Alimentación: El 86% ha reducido la compra de golosinas y el 83% ha optado por marcas de alimentos más económicas. Además, el 80% ha dejado de disfrutar de comidas fuera del hogar, como asados, helados o cafés.
- Entretenimiento: El 85% ha reducido las salidas en familia o con pareja, y el 75% ha dejado de -practicar algún deporte.
- Servicios: El 68% ha cancelado suscripciones de streaming.
- Comunicaciones: El 59% ha recortado el servicio de telefonía celular.
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Estos datos reflejan una situación económica cada vez más compleja, que obliga a los argentinos a priorizar gastos básicos y a renunciar a actividades que antes formaban parte de su rutina.
Estos hallazgos se suman al reciente relevamiento de la pobreza en Argentina, que muestra que más del 54% de la población vive en condiciones precarias. La pérdida del poder adquisitivo y la inflación impactaron directamente en los hábitos de consumo de los argentinos, obligándolos a tomar decisiones acorde a sus necesidades.